¿No les ha pasado que a veces en su circulo de estudio
una discusión sobre una cita o una oración se extiende tanto al punto que ni
siquiera logran completar una sola lección en su sesión de estudios? ¿Y no solo
pasa esa vez sino también en otras sesiones al punto que parece que nunca
lograran finalizar el libro?
Esta disertación la traigo a raíz del hecho de que ‘Abdu’l-Bahá
estaba a favor del estudio por el método socrático, por lo que con este
articulo espero darles un alivio al decirles que eso no esta del todo mal.
Bueno, ¿y qué es el método socrático y como es que ‘Abdu’l-Bahá
estaba a favor? Pues en sus palabras cuando se refirió a la educación infantil:
“Debe enseñárseles la mayoría de ideas mediante la disertación, no por medio de libros. Un niño puede preguntar a otro lo que concierne a estos temas, y el otro debe dar la respuesta. De este modo, harán gran progreso.”
Estrella de oriente,
Volumen IX, página 90
Se que en este articulo estoy trasladando esto más a la
forma de estudio adulta, el cual no veo porque tiene que ser diferente a la
infantil, ya que este método de estudio es el empleado en los países que se
catalogan como el mejor sistema de educación y también es el que usan a nivel
universitario (en su mayoría).
Esto me llevo a una reflexión personal sobre los libros
Ruhí, los cuales a simple vista, y sobretodo en sus primeros volúmenes, parece
llevarnos de la mano con las respuestas. Entonces me pregunte ¿Qué rol juegan
estos libros en el método socrático? La respuesta a la que llegue, es que es la
herramienta, y la herramienta no
puede ser el fin de una sesión de estudios, es decir, nos podemos sentir bien y
todo sumando numero de libros finalizados a la estadística, es naturaleza
humana querer hacer tangible todo tipo de logros. Pero el Kita-i-Aqdas nos pide
estudiar los escritos al amanecer y anochecer. Si los libros Ruhí son la ruta
por la que haremos ese estudio, esa disertación, no veo nada malo en tardar el
tiempo necesario profundizando una sola
cita, una sola lección, ya que esto demostraría la complejitud y
enriquecimiento que proveen unas pocas palabras de Bahá’u’lláh al espíritu
humano; por lo mismo me parece un logro mucho más enorme que hacer terminar
varias personas un libro en la secuencia, porque una persona que sabe de la
importancia de disertar, sabe de la importancia que hay en hacer más tutores
disertadores.
Claro, a veces la meta no es sencillamente la
disertación, sino acciones concretas como convertir nuevos maestros de clases
de niños, animadores prejuveniles o tutores de libro, donde tratar de completar
el libro en un tiempo moderadamente definido es necesario, o como en seminarios
para universitarios u otros tipos de reuniones de estudio donde se sabe que el
tiempo que se tiene es limitado. También es necesario recordar que cada libro
Ruhí tiene un lado muy práctico, por lo que también debe haber sesiones de
estudio que se dediquen a profundizar ese aspecto.
Y tu, ¿tienes buenos recuerdos alargando la conversación en una cita dentro de un circulo de estudio?