Deseo comenzar esta publicación citando unas palabras de
‘Abdu’l-Bahá:
El poder del alma racional descubre las
realidades de los seres, comprende sus particularidades y penetra en los
misterios de la existencia. Todas las ciencias, conocimientos, artes,
maravillas, instituciones, descubrimientos y empresas proceden de la
inteligencia del alma racional.
Continuando en el tema de la Creatividad, el arte puede provenir de dos fuentes de ideas no
completamente separadas: pensamiento
divergente y pensamiento derivado. Y
como maestro, es bueno diferenciar ambas para saber en qué momento se debe
alentar de manera correcta a desarrollarlas.
Pensamiento
divergente. Es el tipo de pensamiento más necesario para un arte que
verdaderamente exprese el interior de la persona; este en esencia surge de unir
dos ideas preconcebidas para formar una idea completamente original, lo que da
paso a nuevos descubrimientos. Ejemplo 1:
Idea 1 – Un engranaje
Idea 2 – Un rio
Idea resultante – Rueda Hidráulica
Idea 2 – Un rio
Idea resultante – Rueda Hidráulica
O pueden ser cosas mucho más sencillas. Ejemplo 2:
Pedir hacer un retrato de una manzana real.
El segundo ejemplo permite la interpretación de la realidad
según como uno la percibe y a desarrollar la habilidad para expresarla.
Pensamiento derivado. Un
pensamiento derivado contiene poco expresión interior dependiendo del grado de
cambio que se haga a la idea original; usualmente proviene de la idea de otros,
lo que pone fronteras al pensamiento.
Ejemplo: Hacer un dibujo de una manzana basado en el retrato
de una manzana hecha por alguien más.
Si bien es cierto que permite descubrir nuevos usos de los
pinceles en algo nuevo, eso nuevo es delimitada por la interpretación de la
realidad de alguien más; sin embargo, al dar mayor libertad y hacer más cambios
al gusto, esta puede pasar a ser una idea preconcebida usada en pensamiento
divergente.
Como pueden notar, el primero es más importante para un
desarrollo más refinado de las cuatros
Cs de las que he venido hablando desde un inicio aunque es imposible
separarla del segundo pensamiento a totalidad, y espero hagan un esfuerzo por
diferenciarlo y alentarlo en los niños.
Referencia.
Cita de ‘Abdu’l-Bahá extraída del libro Arte párrafo 34.